jueves, 27 de julio de 2017

¿Y LOS HECHOS?, Por Agustín Carrara



Cuando damos clases de litigación, partimos de una premisa básica: litigamos sobre hechos. Las leyes dan abstracciones jurídicas, pero cada caso concreto tiene sus propios hechos y pruebas. Si no entendemos eso, no hay discusión real posible.
Hoy, el Gobierno remueve a un Director del Banco Central. Para sacar a un funcionario que tiene acuerdo del Senado y que integra una entidad autárquica e independiente, se basa en que hubo "mala conducta" e "incumplimiento de los deberes de funcionario público". Esas son las abstracciones jurídicas. Ahora hay que ponerles hechos. ¿Qué dice el decreto de remoción?

1) "Que debido a diversas manifestaciones realizadas por el Director del BCRA señor D. Pedro Martín BISCAY respecto de medidas adoptadas por la mencionada entidad", el Ejecutivo solicitó su remoción.
¿Qué manifestaciones? No se sabe, porque no citan ninguna. ¿Cuántas son "diversas"? Tampoco sabemos, pueden ser 2 o 200. ¿Respecto de qué medidas del Banco? Te la debo también, no se menciona ninguna medida en concreto del Central.

2) "Que en el presente caso, existen variados y consistentes elementos de juicio que determinan la violación de la Carta Orgánica del BCRA por parte del señor Pedro Martín BISCAY".
¿Cuáles son esos elementos de juicio? No se sabe, porque en ninguna parte están enumerados. ¿Cuántos son como para considerar que son "variados"? Tampoco sabemos. ¿Qué valoración hacen de esos supuestos elementos como para entender que son "consistentes"? Tampoco hay ninguna valoración de prueba en el decreto.

3) Que una Comisión del Congreso concluyó que "las actitudes del mencionado Director no se compadecen con las obligaciones de su cargo y que afectan el marco de legalidad del BANCO CENTRAL y los objetivos constitucionales del mismo, lo que configura un caso de mala conducta y violación de los deberes de prudencia y responsabilidad requeridos por la función que desempeña".
¿En qué se basó la Comisión para concluir eso? Lo dice el mismo decreto: en cuáles son las funciones del Banco Central. O sea, copian y pegan normativa de la Constitución y de la Carta Orgánica del Banco. Y consideran que eso es una justificación.

4) Recién en el considerando número 12 viene el primer hecho: que en tal fecha de 2016 se juntaron el Presidente del Banco Central, su Gerente Principal de Comunicación y el Sr. Biscay para hablar "sobre la política de Comunicación del banco". "En dicha reunión se expuso sobre la necesidad de ajustarse a las pautas de comunicación para lograr cumplir con un adecuado mensaje a la población, tema central para los objetivos del BCRA. En ese sentido, se aclaró y destacó la importancia de no formular declaraciones sobre temas técnico/coyunturales que se encuentran en tratamiento por parte de los órganos internos del banco, así como otros de importancia institucional que pueden resultar un mensaje erróneo o incorrecto a la sociedad y al sector específico que conforman las entidades financieras reguladas por esta entidad. En ese mismo encuentro se le ofreció todo el soporte profesional de esta gerencia, no habiendo recurrido a tal ofrecimiento".
El primer hecho que citan es una reunión donde a un Director del Banco Central se le dice que no puede salir a opinar públicamente sobre cuestiones de política económica, por más que no exista ninguna normativa que lo prohíba. Las únicas normas de prohibición que hay en este sentido, por supuesto, tienen que ver con la violación de ciertos secretos e información confidencial. ¿Difundió Biscay información confidencial? No. ¿Y entonces qué fue lo que dijo en prensa? Vas a tener que buscarlo en Google, porque como mostramos en el punto 1, el decreto no explica cuáles son esas "diversas manifestaciones". Acá te facilito una nota; vos fijate si encontrás la revelación de algún secreto de Estado, o simplemente una opinión divergente a las decisiones de política económica que están tomando el Central y el Ejecutivo: 
En síntesis, después de 11 párrafos de abstracciones y conceptos jurídicos, el primer hecho que relata el decreto es una reunión donde a un funcionario público -que debe ser independiente del Poder Ejecutivo y que integra un Directorio donde debe haber pluralidad de voces- le dicen “no salgas a hablar”, cuando él expresa críticas técnicas hacia ciertas decisiones de política económica y monetaria.

5) Que la Comisión del Congreso dijo que “las declaraciones públicas hechas por un director del Banco Central, no se adecúan en lo más mínimo a las políticas de comunicación de cualquier Banco Central mínimamente responsable. Tampoco se adecúan al deber de generar previsibilidad y confianza en las políticas del Banco Central, sino que por el contrario van en sentido inverso a dichas políticas, impactando por lo tanto negativamente en los efectos que dichas políticas buscan generar”
(Un detalle, para que se entienda: esa comisión tiene 5 legisladores. La votación salió 3 a 2. Los tres que votaron a favor de la remoción responden al oficialismo).
Nuevamente, ¿qué declaraciones públicas? Acá no hay ninguna citada. ¿Por qué “no se adecúan en lo más mínimo a las políticas de comunicación de cualquier Banco Central mínimamente responsable”? Acá no hay ni un mínimo intento de argumentación. Directamente saltan a una conclusión que no está fundada en ningún hecho. 
¿Las declaraciones de un Director del Banco Central impactan negativamente en los efectos que las políticas del Banco buscan generar? Bueno, ¿nos podrían mostrar cómo? Un ejemplo, nomás. No es tan difícil.
Y además, si eso es cierto, ahora que echan al Director se supone que ya no debería haber un impacto negativo sobre los efectos de las políticas del BCRA, ¿no? Es decir, ahora debería bajar la inflación, bajar el dólar, frenarse la fuga de capitales, llegar las inversiones, bajar la tasa de interés de los bancos, etc.

6) “Que no se trata en el caso de su supuesto de afectación de la libertad de expresión, tal como ha sido compartido por la Comisión, pues con tal criterio se podría sostener que también deberían violarse los secretos de estado o publicarse elementos de la vida privada de las personas -protegidos por las normas constitucionales- o dejarse de lado la reserva que impone la responsabilidad del desempeño de determinados cargos”.
El razonamiento que siguen es el siguiente: acá no se afecta la libertad de expresión, porque la libertad de expresión no es un derecho absoluto. En realidad, lo que quieren decir es que no se trata de una afectación “ilegítima” de la libertad de expresión.
Esto sería lo mismo que si yo dijera lo siguiente. El Estado puede mandar a alguien a la guerra, donde la persona puede morir (cierto). Por lo tanto, el derecho a la vida no es absoluto (cierto). Por lo tanto, si el derecho a la vida no es absoluto, el Estado puede matar a quien quiera (falso). Un nene de 6 años te entiende la falacia de ese razonamiento.

7) “Que, en consecuencia, cabe afirmar que media mala conducta e incumplimiento de las disposiciones contenidas en la Carta Orgánica del Banco al realizar uno de sus Directores afirmaciones que ponen en riesgo los objetivos establecidos en la misma, particularmente en lo que se refiere a la estabilidad financiera en un sistema bancario de encajes fraccionarios y en el marco de un país que ha atravesado múltiples crisis cambiarias y bancarias en las últimas décadas”.
En primer lugar, para decir “en consecuencia”, antes debería haber una cadena de razonamientos lógicos, que en todo este decreto no hay.
Segundo, otra vez “afirmaciones que ponen en riesgo los objetivos establecidos en la Carta Orgánica del Banco Central”. ¿Qué afirmaciones? ¿Cómo ponen en riesgo esos objetivos?
Si lo que está en riesgo es la estabilidad financiera, posiblemente se deba a la forma en que los bancos eligen estructurar el sistema y sus negocios, ya que son ellos los que generan riesgo sistémico. No olvidemos, además, que se trata de un sistema donde los principales actores económicos y financieros son a su vez los principales intermediarios en el mercado criminal de servicios offshore, donde se evaden impuestos, se lavan activos y se fugan capitales. 
Entonces, pensar que la estabilidad financiera de la Argentina no se ve afectada por la conducta de los bancos sino por lo que un Director del Banco Central pueda decir en una columna en un diario es, en el mejor de los casos, ingenuo. Y en el peor de los casos es directamente una mentira.
En conclusión, ¿qué tenemos?
Un caso donde se afecta la libertad de expresión de manera arbitraria, prohibiendo a un funcionario público expresar una opinión distinta a la del Gobierno y la conducción oficialista del Banco Central.
Un decreto que prácticamente no menciona ningún hecho. Por lo tanto, una norma que no está motivada, y que como tal no cumple con el art. 1 de la Constitución, según el cual todos los actos de Gobierno deben ser motivados y racionales.
Un Banco Central que parece no entender que los cuerpos colegiados (como el Directorio) justamente deben garantizar la pluralidad de voces. Por algo quienes hicieron esa ley dijeron “acá necesitamos 10 personas debatiendo, en lugar de una sola”.
Finalmente, un doble discurso que no es exclusivo de este partido político sino de varios: cuando soy oposición, exijo libertad y autonomía en la conducción de ciertos organismos autárquicos; cuando soy oficialismo, les pido que renuncien porque necesito “gente de confianza”. Y si no renuncian, los sacamos como sea.
¿Realmente se olvidaron los hechos? No creo. Me inclino a pensar que han decidido no incluirlos. Porque si los incluyeran, tendrían que citar todas las declaraciones públicas que ha hecho Biscay. Y al hacer eso, se estarían poniendo en evidencia ellos mismos, porque quedaría claro que no están echando a alguien por difundir información confidencial. Lo están echando por pensar distinto. Para ser más precisos, lo están echando por pensar distinto y no ser sumiso al Gobierno.

Agustín Carrara (Director Ejecutivo - Centro de Investigación y Prevención de la Criminalidad Económica)

lunes, 24 de julio de 2017

EL ESTADO CONTINENTAL INDUSTRIAL EN LA CONCEPCIÓN GEOPOLÍTICA DE ALBERTO METHOL FERRÉ, Por Sebastián Torres y Miguel Barrios



El concepto de Estado Continental Industrial (ECI)de Alberto Methol Ferré, uno de los pensadores latinoamericanos más originales del siglo XX, constituye un elemento central para abordar y repensar los principales desafíos económicos y sociales que enfrentan los países de nuestra región en la actualidad.
Methol Ferré planteaba como núcleo principal de su pensamiento que el siglo XXI estaría constituido por un “concierto” de Estados con una unidad geográfica de carácter industrial, y que por lo tanto, aquellas unidades políticas que no lograran sumar capacidades de carácter continental, no poseerían soberanía.
En ese aspecto, rescata la tradición política de unidad de la independencia hispanoamericana de San Martín, Bolívar y Artigas,y la originalidad de los movimientos nacionales populares. Tomando estas tradiciones como punto de partida, Methol Ferré crea la categoría de ECI, como único camino posible de desarrollo económico y social para América Latina.

Geopolítica es perspectiva global de la historia en la dinámica de los espacios. 
No hay historia sino en los espacios. No hay estado sin territorialidad.
Methol Ferré, 2009

Biografía
Nacido en Uruguay en 1929, historiador, teólogo, filósofo ydocente, el leitmotivde su vida será el estudio de su país (“Estado chico”,consecuencia de la fragmentación política latinoamericana),con el objetivo de señalar la importancia de la concreción de una“Nación Latinoamericana” a partir de sus dos polos, hispánico y lusitano.
Su nacionalismo latinoamericano tiene una raíz determinante en las figuras de Luis Alberto de Herrera y Eduardo Víctor Haedo. Al primero lo frecuentó y del segundo fue su secretario, y travésde ellos, con su militancia joven en el Partido Nacional, desarrolló una base políticacentrada en la solidaridad Hispanoamericana Continental.
En los núcleosHerreristas se entronca ya desde muy joven con las lecturas de las obras de Víctor Raúl Haya de la Torre, primer teórico de los movimientos nacionales populares en América Latina (y fundador de laAlianza Popular Revolucionaria Americana), y con el cuestionamiento y rechazo a los intentos de instalar bases norteamericanas en el Uruguay.
En el año 1955 funda la revista Nexo (con Arens Pons y Reyes Albedie), yrealiza un acercamiento con los intelectuales Abelardo Ramos y Helio Jaguaribe. A partir de 1967 participa en la revista católica “Víspera”, que se transformará con el tiempo en el principal medio de reflexión católico latinoamericano. Esta revista tendrá además una amplia repercusión en el continente del Concilio Vaticano II, y sumado al Documento de Medellín de la Conferencia Episcopal Latinoamericana (CELAM), sus escritos seránasí precursores de la posteriormente denominada “Teología de la Cultura” o “Teología del Pueblo”.Jorge Siles Salinas, Methol, Helio Jaguaribe y Arturo Somoza

El concepto de globalización
“El siglo XXI está convocado a establecer un nuevo concierto de Estados Continentales Industriales Modernos, plural, para el gobierno de la globalización. ¿América Latina aunaráenergías como para poder participar en ese nuevo concierto de potencias? ¿Es posible?” (Methol Ferré, 2009: 100).

El núcleo básico de la concepción geopolítica de Methol Ferré, define a la globalización, no como un concepto economicista, sino comoun proceso histórico multidimensional. La“actualidad” por la actualidad misma no existe, sino que es hija de un proceso histórico y de un diálogo permanente entre pasado y presente. Por lo tanto,en la actual etapa de la globalización, sólo tienen protagonismo aquellos Estados que suman capacidades de ECI.

Ahora bien, ¿qué entiende Methol Ferré por globalización? “El primer movimiento globalizador se representa en el largo proceso de difusión de la presencia humana sobre el planeta que duró 250.000 años. Se trata de un fenómeno que se puede rastrear hasta los orígenes de la humanidad como el homosapiens que desde África Oriental se desplaza, a pie hasta medio Oriente y luego hasta Europa y Asia, pasando por las islas de Indonesia hacia Australia; casi contemporáneamente una segunda corriente migratoria llega a Bering y desde allí a América. Es la primera globalización mundial hecha a pie, lentamente, en el arco de decenas de miles de años, que la memoria humana privada aun de la escritura no pudo registrar y fijar en el tiempo como crónica” (Methol Ferré, 2006: 37).

“La escritura amplía en forma gigantesca la capacidad y la exactitud de la memoria; escritura y memoria son el secreto de la segunda globalización, esta si histórica y autoconsciente. Además no ya a pie, sino sobre el océano. Las naves –carabelas, galeones, bergantines- convirtieron a Europa en el centro del mundo.Si la primera globalización, la que se hizo a pie, terminó en el continente americano, la segunda globalización, la oceánica, comienza justamente con América. Existe globalización cuando un círculo se cierra y se vuelve imposible que exista otro” (Methol Ferré, 2006: 39).

Methol divide así a la globalización en dos grandes períodos: una “globalización de a pie” de miles de años que culmina en América, y una “globalización oceánica” como segunda globalización que empieza en América.En esta segunda globalización ubica el inicio de la política mundial, teniendo en cuenta que debido a las limitaciones de movilidad no existía una idea cabal de la globalidad. Con la escritura y la navegación, Europa se transforma en el centro de la política mundial.

Las etapas de la Globalización
Methol Ferré toma como referencia al geógrafo inglés HalfordMackinder y principalmente su conferencia de enero de 1904 denominada “El pivote geográfico de la historia”. En esa conferencia,Mackinder señala que el mundo se encontraba ante el fin de una época histórica de cuatro siglos, a la que llamaba la “época colombina”.

“La era de la formación unificada de la globalización abierta por Castilla y Portugal cuando iniciaron la navegación de altura, oceánica, se terminó. Ahora se necesitaban otros caminos para la geografía, más intensivos e incluso de síntesis filosófica (digamos, hacerse geopolíticos, geoculturales, geoproductivos)… la geografía descriptiva ya no alcanzaba. La primera fase de la globalización, la era colombina, ha terminado” (Methol Ferré, 2009: 89).
Si bien la influencia de Mackinder es nítida, Methol va más allá que el autor inglés, y parte desde América Latina. Esta es una característica fundamental de todo el pensamiento de Methol y constituye su originalidad:

“Desde el 900 el mundo es un solo sistema… De tal modo, lo que ante todo importa es determinar las fases principales del único sistema mundial en proceso, del que somos parte. Y donde no hay comprensión de sí mismo sin el horizonte de la situación específica del sistema mundial. Esta es la originalidad que inaugura el siglo XX, que puede hablar así de guerras mundiales.” (Methol Ferré, 2009: 90-91).

El autor constituye entonces su visión con los siguientes dos elementos:
– Una definición de geopolítica multidisciplinaria, alejándose por completo de una geopolítica de perspectiva militarista (y vinculando a la geopolítica con la integración y el desarrollo industrial de los Estados).

– El empleo de un concepto singular, el de “sistema”, pero como sistema mundial geopolítico, y no meramente como sistema desde la perspectiva de la sociología (Parsons), o de sistema-mundo(Wallerstein).

Basándose posteriormente en el libro de Hans Weiger “Geopolítica, Generales y Geógrafos”, conoce las grandes líneas del pensamiento de Federico Ratzel.Weigerseñala en su libro que la revolución industrial cambiaría la política mundial:

“El ferrocarril y la carretera, el telégrafo y el teléfono, se convirtieron para el pensamiento geográfico-político de las últimas décadas del siglo XIX en los instrumentos con que podía levantarse un sistema Estatal Orgánico de máximas dimensiones continentales” (Weiger, 1943: 115-117, citadopor Methol Ferré, 2009: 84).

A partir de la lectura de Weiger, sumada a la política continentalistadel Nuevo ABC de Perón, a la tradición del hispanoamericanismo de San Martin, Bolívar y Artigas, yallatinoamericanismo de Manuel Ugarte, Methol Ferré crea el concepto de ECI.

La categoría política de ECI, es entonces un concepto núcleo inventado y teorizado por Methol Ferré, más allá de que recurre para la sustentación teórica a otros autores como Federico Ratzel y a la perspectiva de Estado Nación Industrial de Ernest Gellner en su obra

“Naciones y nacionalismos”.
Methol Ferré entra a su máxima originalidad cuando nos dice que el siglo XX se abrió con el primer ECI Moderno, Estados Unidos. Afirma además que el siglo XX representó una situación híbrida representada por el enfrentamiento de dos ECI: Estados Unidos y la Unión Soviética:
“Sin embargo, la idea de la nueva centralidad histórica del Estado Continental no ingresó en la ciencia política. Solo se hablaba vagamente de superpotencias, sin explicar los nuevos significados y los nuevos umbrales históricos que se alcanzaban irreversiblemente. La idea de la era de los Estados Continentales quedó arrumbada en los trastos viejos de la geopolítica alemana y los ensueños cartográficos de Haushofer.

Los conflictos de democracia liberal vs.marxismo,y de economía de mercado vs. planificación total, en vez de enmarcarse en los Estados continentales, borraban u oscurecían a los Estados Nación. En nuestros tiempos políticos sin la idea de los Estados Nación nada se entiende. Pero con la sola idea del Estado Nación tampoco nada se entiende. Hubo una idea que sirve para todo y que termina no sirviendo para nada” (Methol Ferré, 2009: 95).

Segunda Globalización y Estados Continentales
Para Methol Ferré, la bipolaridad escondíaentonces el “orden” de fondo, constituido porla era de los Estados Continentales:“Sólo se hablaba vagamente de superpotencias, sin explicar los nuevos significados y los nuevos umbrales históricos que se alcanzaban irreversiblemente” (Methol Ferré, 2009: 95).

La implosión de la Unión Soviética no significóen este sentido el triunfo de los Estados Unidos sino el inicio de una nueva lógica mundial.En ese nuevo marco, el Mercosur y la Unasur constituían para Methollas instancias geopolíticas claves para que América del Sur se convirtiera en Estado Continental en la globalización, o para que quedara de lo contrario sin destino histórico.

Un ECI significa en definitiva el salto de un Estado Nación Industrial a las dimensiones geográficas continentales.En su última obra, presentada el mismo año de su fallecimiento (2009), Methol Ferré veía las nuevas condiciones geopolíticas de la globalización y definía clara y sencillamente los componentes de un ECI:

“Un Estado con su burocracia organizadora que implica una gran herencia del derecho Romano, que incluye al ejército, símbolo mayor del monopolio de la violencia. Una industria, que desde la revolución maquinista inglesa implica de más en más la unidad de ciencia y tecnología con la misma industrialización. Cada vez más, desde el siglo XIX, no es posible ninguna sociedad industrial moderna sin un creciente dominio y difusión científico-tecnológico.

Lo industrial implica lo científico-tecnológico de modo crecientemente indisoluble. Una sociedad que no tenga el mayor despliegue científico-tecnológico será literalmente industrialista pero no industrial. Una alfabetización universal, lo que implica una lengua común, un idioma literario, sino total sí hegemónico. La cultura y la comunicación común que instauran una dinámica nacional igualitaria se objetivan en la alfabetización total, a la altura de la exigencia de la época. Este espacio homogeneizador se manifiesta en una cultura común nacional.

“Estado (burocracia), Industria (ciencia-tecnología), Educación Común (alfabetización, cultura común, idioma común, nación, democratización). A estos tres elementos seria pertinente un cuarto: empresas que compiten en el mercado” (Methol Ferré, 2009: 67-68).
Adicionalmente, en su concepción filosófica de la historia, la humanidad culminaría en un solo Estado Mundial, es decir que el pasaje final sería hacia un solo Estado, que saldría del concierto y lucha de los Estados continentales. En este sentido, el Estado Nación Industrial como concepto geopolítico estaba agotado(como así tambiénlos Micro-Estados étnicos surgidos en Europa, en África, y los Estados agromineros exportadores latinoamericanos).

El Estado Continental Industrial Suramericano como única condición de soberanía
Methol Ferré huía de los análisis a-históricos y abstractos. Entendía que América Latina tenía que materializarse a través de un Estado Continental Sudamericano (sin unidad sudamericana no habría una“América Latina”).

En la concepción geopolítica de Methol, el camino principal para llegar a la consolidación de la Nación Latinoamericana (de México a Tierra del Fuego), lo constituye la Unión Suramericana, es decir, el Estado Continental Suramericano, cuya base central es la unificación de Brasil con Argentina (y Venezuela en la actualidad).

“El proceso de globalización contemporánea comienza con el descubrimiento luso castellano de América Latina en el camino hacia el extremo Oriente. En ese momento comienza también la relación entre la Europa Atlántica y el resto del mundo, como centro de periferia.
América Latina venía a ser la periferia trasatlántica más inmediata del viejo continente, una suerte de Hinterland que se estructuraba alrededor de los dos viejos virreinatos indios de México (con Capital en México en la ecúmene azteca, en América Central y en las Antillas), del Perú con capital en Lima en la ecúmene Inca, que se extendía sobre la mayor parte de América del Sur y de la gobernación del Brasil portugués. Este descubrimiento significó para América el momento en que comienza una relación mercantilista de monopolio con Europa” (Methol Ferré, 2006: 41).

Para Methol, en el mundo previo a la llegada de los ibéricos (en lo que sería hoy América Latina) no existía unidad cultural y reconocía sólo a dos Estados tradicionales, agrarios, no industriales y teocráticos: Aztecas e Incas(los cuales no teníanvínculos entre sí).

América Latina nace con el mutuo descubrimiento y la nación se va conformando a través del mestizaje, de la lengua común, de la historia común y del catolicismo popular. Por supuesto una unidad en la diversidad, en la pluralidad, con matices, pero con grandes fecundidades.

Volviendo al análisis de los procesos históricos en nuestra región, la independencia americana con respecto de España significa para Methol la fragmentación de la gran posibilidad de una confederación continental (elemento nocomprendido por Fernando VII).

Simultáneamente, el autor destaca varios aspectos esenciales desconocidos:

a)El condado de Portugal es un desprendimiento del reino de Castilla, osea Portugal viene del mismo origen hispánico de Castilla. Esto es muy importante en lo que hace a nuestro origen común con Brasil.

b)Methol destaca la geopolítica de alianzas familiares monárquicas, a tal punto que entre 1580 y 1640 Portugal estuvo unida a España.

c)La mayor experiencia de integración política, cultural, pedagógica, social y militar se vio en las misiones jesuíticas. Las misiones Jesuíticas fueron traídas a la región de la Cuenca del Plata en 1604 cuando las dos Coronas estaban unidas bajo un solo rey. Las aparentes coincidencias eran para Methol profundidades históricas culturales que había que retomarlas para darle un rumbo a la integración.

“Las guerras de la independencia y el fracaso del congreso de Panamá disgrega al continente en Estados aislados y separados entre sí. Un resultado que está bien lejos del que Bolívar buscara: unificar América Latina en una nación de repúblicas.
En síntesis, la independencia inaugura una fragmentación que depende de Inglaterra, el segundo poder global, sucesor del imperio hispano nacido de la unión entre Castilla y Portugal (1580 y 1640)” (Methol Ferré, 2009: 107).

En América Latina luego de la independencia no nacen Estados-Nación industriales, sino simulacros de ellos con ese nombre, con sus respectivos gobiernos, constituciones, ejércitos, banderas, himnos, pero que en verdad reflejan un nuevo tipo de Estado al que denomina “Estado-Ciudad”.

De ahí la importancia de dar un salto cualitativo y cuantitativo desde los Estados-Ciudad a los Estados-Continentales, rescatando el interaccionismo latinoamericano de la generación del 900,y ala figuras de Ugarte, Rodó y del Barón del Rio Branco con su primer ABC.
Pero la integración solo tiene sentido en la medida en que sirva para sumar soberanía, y por lo tanto su base es cultural:

“La integración de América Latina tiene una base cultural fuerte y un tejido conectivo económico muy débil. El Panamericanismo de Estados Unidos tiene una base económica fuerte pero carece de una realidad cultural unitaria”.

“Existe un nexo en lo cultural entre cultura católica e integración. Las fuerzas reales que operan en el mundo se reagrupan y delimitan en los Estados y en sentido analógico, en las Iglesias. Este razonamiento se aplica también en la perspectiva integracionista: potencia del poder y entonces potencias de la Misión de la Iglesia de influir sobre el poder del mundo”(Methol Ferré, 2006: 121).

El ECI supone así también a la cultura como un elemento intangible movilizador. Y para Methol la religión es la dimensión más profunda de la cultura, y en particular, la religiosidad popular católica latinoamericana (que debería potenciar al Estado Continental sudamericano).
En definitiva, el único escenario deseable para no ser “coro de la historia”, es el de generar un Estado Continental que nos permita ser parte del concierto multipolar junto a los otros Estados Continentales. De ahí la importancia que Methol otorga a los procesos de integración latinoamericana, y en particular al Mercosur:

“El Mercosur es el gran desencadenante de la nueva integración, que preside nuestra entrada en el siglo XXI. Eso no quiere decir que sea una entrada necesariamente serena, pues lo puede ser muy turbulenta. Sería lo más normal. El Mercosur inaugura propiamente la nueva historia Latinoamericana” (Methol Ferré, 2009: 122).

Notas

1 Ver también en este sentido el discurso de Juan Domingo Perón del 11 de noviembre de 1953, donde plantea que ha llegado la hora del Continentalismo a partir de un núcleo básico de aglutinación (unidad de Argentina y Brasil), definiendo así el concepto de autonomía periférica y laestrategia geopolítica del Latinoamericanismo bajo la consigna:“primero Sudamérica”. El Nuevo ABC estaba constituido por el Brasil de Getulio Vargas y Chile, gobernado por el General Carlos Ibáñez del Campo.
2 Su pensamiento ejercerá además una gran influencia en la iglesia Latinoamericana –entre ellos en el Jesuita Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa Francisco- y sobre los pensadores del revisionismo histórico argentino y brasilero.
3 Con una novedad geopolítica: la política global dejaba de ser occidental para transformarse en multicivilizacional(y por primera vez en la historia occidental, ya no conduciría el proceso de globalización).
4 Es importante destacar cómo ubica a América como centro de su pensamiento, al afirmar que la primera “globalización a pie” culmina en América, y que la segunda “globalización oceánica” comienza en América.
5 Sin dar el salto al ECI, estos Estados quedarían fuera de la historia ypara ser protagonistas del Estado Mundial, necesariamente se debería convertir previamente en Estados Continentales.
6 Señalemos también como elementos de interés que: 1) el primer papa latinoamericano de la historia es un Jesuita, 2) la virgen de Luján, Patrona de los Argentinos, era una virgen portuguesa que quedó atascada en Luján cuando un ciudadano portugués residente en el Río de la Plata la enviaba a un ciudadano que residía en Brasil, y 3)El libro “La Argentina”, del primer historiador del Río de la Plata nacido en Asunción, Ruiz Díaz de Guzmán, fue editado en 1602 en Lisboa.

Bibliografía

-Methol Ferré, Alberto (1971). El Uruguay como problema. Ediciones de la Banda Oriental. Montevideo.
-Methol Ferré, Alberto (2006). La América Latina del Siglo XXI. Ensayo Edhasa. Buenos Aires.
-Methol Ferré, Alberto (2009). Los Estados Continentales y el Mercosur. Ediciones Arturo Jauretche. Buenos Aires.
-Weiger, Hans (1943). Geopolítica, General y Geógrafo. Fondo de Cultura Económica FCE. México.

* Torres es Post-Doc en Economía. PhD y Magister Desarrollo Económico. Rector IAEN Instituto de Altos Estudios Nacionales de Ecuador. Barrios es Doctor en Educación. Doctor en Ciencia Política(Argentina)

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miércoles, 12 de julio de 2017

EL COLAPSO DE SU TEOLOGÍA: ¿RAZÓN MAYOR DE LA RENUNCIA DE BENEDICTO XVI, Por Leonardo Boff


Esta nota publicó Leonardo Boff, el 9 de Marzo de 2013, a raíz de la renuncia del Papa Bendedicto XVI, y antes de que fuera designado el Papa Francisco; con mucha maestría Boff describe la teología del Papa saliente, que es una teología de poder y de sometimiento, a contrario de la teología de la liberación, nacida en latinoamérica; mientras que aquella hace estragos en muchos sectores católicos conservadores, y también en el mundo evangélico, al cual pertenece el editor de este blog, por ello, y por la necesidad de practicar un ecumenismo concreto, es que publica seguidamente a este teólogo -Boff es mucho más que un teólogo-, y también a Frei Betto. Es que ambos, puede decirse, practican una teología de la liberación universal.



Siempre es arriesgado nombrar a un teólogo para la función de papa. Él puede hacer de su teología particular la teología universal de la Iglesia e imponerla a todo el mundo. Sospecho que este ha sido el caso de Benedicto XVI, primero como cardenal, nombrado Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (ex-Inquisición) y después como Papa. Tal hecho no goza de legitimidad y se transforma en fuente de condenaciones injustas. Efectivamente condenó a más de cien teólogos y teólogas por no encuadrarse en su lectura teológica de la Iglesia y del mundo.

Razones de salud y sentimiento de impotencia frente a la gravedad de la crisis en la Iglesia lo llevaron a renunciar. Pero no solo eso. El texto de su renuncia habla de la “disminución de vigor del cuerpo y del espíritu” y de “su incapacidad” para enfrentar las cuestiones que dificultaban el ejercicio de su misión. Detrás de estas palabras, estimo que se oculta la razón más profunda de su renuncia: la percepción del colapso de su teología y del fracaso del modelo de Iglesia que quiso implementar. Una monarquía absolutista no es tan absoluta hasta el punto de vencer la inercia de envejecidas estructuras curiales.

Las tesis centrales de su teología siempre fueron problemáticas para la comunidad teológica. Tres de ellas acabaron siendo refutadas por los hechos: el concepto de Iglesia como un «pequeño mundo reconciliado»; que la Ciudad de los Hombres sólo adquiere valor delante de Dios pasando por la mediación de la Ciudad de Dios, y el famoso «subsistit» que significa: sólo en la Iglesia católica subsiste la verdadera Iglesia de Cristo, todas las otras Iglesias no se pueden llamar Iglesias. Esta concepción estrecha de una inteligencia aguda pero rehén de sí misma, no tenía la suficiente fuerza intrínseca ni la adhesión necesaria para ser implementada. ¿Benedicto habría reconocido el colapso y coherentemente renunciado? Hay razones para esta hipótesis.

El Papa emérito tuvo en san Agustín a su maestro e inspirador, de hecho fue objeto de algunas conversaciones personales con él. De Agustín asumió la perspectiva de base, comenzando por su esdrújula teoría del pecado original (se transmite por el acto sexual de la procreación). Esto hace que toda la humanidad sea una «masa condenada». Pero dentro de ella, Dios por Cristo instauró una célula salvadora, representada por la Iglesia. Ella es «un pequeño mundo reconciliado» que tiene la representación (Vertretung) del resto de la humanidad perdida. No es necesario que tenga muchos miembros. Bastan pocos, siempre que sean puros y santos. Ratzinger incorporó esta visión. La completó con la siguiente reflexión: la Iglesia está constituida por Cristo y los doce apóstoles. Por eso es apostólica. Es solo este pequeño grupo. Excluye a los discípulos, a las mujeres y las masas que seguían a Jesús. Para él no cuentan. Son alcanzadas por la representación (Vertretung) que «el pequeño mundo reconciliado» asume. Este modelo eclesiológico no tiene en cuenta el vasto mundo globalizado. Quiso entonces hacer de Europa «el mundo reconciliado» para reconquistar la humanidad. Fracasó porque el proyecto no fue asumido por nadie y hasta fue puesto en ridículo.

La segunda tesis está tomada también de san Agustín y de su lectura de la historia: la confrontación entre la Ciudad de Dios y la Ciudad de los Hombres. En la Ciudad de Dios está la gracia y la salvación: ella es el único camino que conduce a la salvación. La Ciudad de los Hombres se construye por el esfuerzo humano. Pero, como ya está contaminado todo su humanismo y sus otros valores, no consiguen salvarse porque no han pasado por la mediación de la Ciudad de Dios (Iglesia). Por eso ella está plagada de relativismos. Consecuentemente el cardenal Ratzinger condena duramente la teología de la liberación, porque ésta buscaba la liberación por los mismos pobres, hechos sujetos autónomos de su historia. Pero como no se articula con la Ciudad de Dios y su célula, la Iglesia, es insuficiente y vana.

La tercera es una interpretación muy personal suya que da del Concilio Vaticano II cuando habla de la Iglesia de Cristo. La primera redacción conciliar decía que la Iglesia católica es la Iglesia de Cristo. Las discusiones buscando el ecumenismo, substituyeron es por subsiste para dar lugar a que otras Iglesias cristianas, a su modo, realizasen también la Iglesia de Cristo. Esta interpretación sustentada en mi tesis doctoral mereció una explícita condena del cardenal Ratzinger en su famoso documento Dominus Jesus (2000), donde afirma que subsiste viene de «subsistencia» que sólo puede ser una y se da en la Iglesia católica. Las demás «iglesias» poseen «solamente» elementos eclesiales. Este «solamente» es un añadido arbitrario que hace al texto oficial del Concilio. Tanto algunos notables teólogos como yo mismo mostramos que este sentido esencialista no existe en latín. El sentido es siempre concreto: «conseguir cuerpo», «realizarse objetivamente». Este era el «sensus Patrum» el sentido de los Padres conciliares.

Estas tres tesis centrales han sido refutadas por los hechos: dentro del «pequeño mundo reconciliado» hay demasiados pedófilos hasta entre los cardenales, y ladrones de dineros del Banco Vaticano. La segunda, que la Ciudad de los Hombres no tiene densidad salvadora delante de Dios, se construye sobre un error al restringir la acción de la Ciudad de Dios solamente al campo de la Iglesia. Dentro de la Ciudad de los Hombres se encuentra también la Ciudad de Dios, no bajo forma de conciencia religiosa sino bajo forma de ética y de valores humanitarios. El Concilio Vaticano II garantizó la autonomía de las realidades terrestres (otro nombre para secularización) que tiene valor independientemente de la Iglesia. Cuentan para Dios. La Ciudad de Dios (Iglesia) se realiza por la fe explícita, por la celebración y por los sacramentos. La Ciudad de los Hombres, por la ética y por la política.

La tercera, que solamente la Iglesia Católica es la única y exclusiva Iglesia de Cristo y, todavía más, que fuera de ella no hay salvación, tesis medieval resucitada por el cardenal Ratzinger, fue simplemente ignorada como ofensiva a las demás Iglesias. En vez de «fuera de la Iglesia no hay salvación», se introdujo en el discurso de los papas y de los teólogos «la oferta universal de salvación a todos los seres humanos y al mundo».

Alimento la seria sospecha de que tal fracaso y colapso de su edificio teológico, le quitó “el necesario vigor del cuerpo y del espíritu” hasta el punto de, como confiesa, de “sentirse incapaz de ejercer su ministerio”. Cautivo de su propia teología, no le quedó otra alternativa sino honestamente renunciar.
Fuente: http://www.servicioskoinonia.org/boff/articulo.php?num=550

lunes, 10 de julio de 2017

FORMACIÓN DE MILITANTES, Por Frei Betto


Frei Betto, teólogo de la liberación
Hay quien se mueve, se activa y se moviliza en función de causas políticas. En los últimos tiempos, los estudiantes ocuparon escuelas y, ahora, los manifestantes gritan en las calles ¡FUERA TEMER!

El entusiasmo es bueno en la actividad política, pero no forma militantes. Pasado el apasionamiento, las aguas vuelven a coger su nivel. Lo que forma militantes revolucionarios para toda la vida es la articulación entre práctica y teoría.

La práctica se da en movimientos sociales, sindicatos, partidos o instancias pastorales como las comunidades eclesiales de base. La formación teórica exige herramientas adecuadas para comprender la realidad y saber cómo transformarla.

Durante los años de la dictadura se trabajó fuerte en esas dos caras de la moneda: la práctica y la teoría. Se multiplicaron en el país los movimientos sociales y proliferaron por todo Brasil equipos de educación popular que se encargaban de la parte teórica. El movimiento sindical y el PT llegaron a dirigir, en Cajamar (SP), una escuela-albergue a la que afluían militantes de todos los estados. Hoy, el MST mantiene en Guararema (SP) la Escuela Florestan Fernandes para perfeccionar la formación de sus militantes.

Me pregunto qué ha sido de los jóvenes que ocuparon las escuelas a inicios de año. ¿Terminado el movimiento se acabó el entusiasmo? ¿Quién les ofreció herramientas teóricas para que comprendieran que la lucha de un sector de la sociedad es la lucha de un pueblo, y que el antagonismo entre la libertad y la opresión es la búsqueda de una sociedad en la que el capital deje de prevalecer sobre los derechos humanos?

Las herramientas teóricas están disponibles y son de fácil acceso: las obras clásicas del marxismo, los libros de Paulo Freire, la historia de las revoluciones sociales, la historia de América Latina y Brasil.

Los cambios sociales no son producto solo del entusiasmo, sino, sobre todo, de convicciones arraigadas, capaces de tornar inmunes a los y las militantes a las tres tentaciones principales que aparecen en la lucha política: el poder, el dinero y el sexo.

Cuando la lucha se centra en alcanzar el poder y/o mantenerse en él, se troca un proyecto de nación por una feria de cargos y salarios. Cuando se corre detrás del dinero y el aumento del patrimonio personal, se cede a la corrupción. Cuando se cae en la promiscuidad, hiriendo los sentimientos de compañeras y compañeros, se mina la base ética de la construcción de hombres y mujeres nuevos.

En la historia de Brasil hay suficientes ejemplos de militantes que se destacaron por sus firmes convicciones ideológicas y prácticas revolucionarias: Tiradentes, Prestes, Olga Benario, Mauricio Grabois, Mariguella, Apolonio de Carvalho, Fray Tito, Chico Mendes, Margarida Alves, la hermana Dorothy Stang, el padre Josimo, etc.

Basta estudiar sus historias para saber cómo se formaron y fueron capaces de enfrentar todo tipo de adversidades para mantenerse fieles a la causa de la liberación de nuestro pueblo.



Frei Betto es autor, entre otros libros, de Batismo de sangue (Rocco).

www.freibetto.org/> twitter:@freibetto.

Traducción de Esther Perez

Copyright 2017 – Frei Betto - 

QUIEN ES FREI BETTO



El escritor brasileño Frei Betto es un fraile dominico. conocido internacionalmente como teólogo de la liberación. Autor de 60 libros de diversos géneros literarios -novela, ensayo, policíaco, memorias, infantiles y juveniles, y de tema religioso en dos acasiones- en 1985 y en el 2005 fue premiado con el Jabuti, el premio literario más importante del país. En 1986 fue elegido Intelectual del Año por la Unión Brasileña de Escritores. 



Asesor de movimientos sociales, de las Comunidades Eclesiales de Base y el Movimiento de Trabajadores Rurales sin Tierra, participa activamente en la vida política del Brasil en los últimos 50 años.

miércoles, 5 de julio de 2017

DERECHOS HUMANOS VERSUS TOTALITARISMO CORPORATIVO, Por Eugenio Raúl Zaffaroni



Derechos Humanos versus totalitarismo corporativo


El mundo y la región viven la etapa de colonialismo avanzado que corresponde al totalitarismo corporativo, afirma Raúl Zaffaroni en este artículo. En este contexto los Derechos Humanos constituyen un obstáculo a eliminar. En Argentina, y dentro de ese marco, la Corte Suprema declaró prescriptibles las acciones civiles de reparación por crímenes de lesa humanidad contrariando la posición de todo el sur del planeta, que conserva la esperanza de reparaciones por los genocidios colonialistas.



Por E. Raúl Zaffaroni*

El derecho internacional de los Derechos Humanos surgió formal y tímidamente a partir de la Declaración Universal de 1948, para ir cobrando volumen mediante tratados multilaterales universales y regionales a lo largo de décadas.

Este proceso no se inició como una ocurrencia, pero tampoco de calma meditación, sino del miedo de un mundo asustado por la catástrofe que había terminado tres años antes. Se demoró por efecto de la llamada guerra fríaque polarizó el mundo y, pese a ella, fue avanzando lenta y dificultosamente, venciendo resistencias.

Su objetivo máximo es dar realidad al principio de que todo ser humano es una persona y, por ende, debe ser tratado y respetado como tal.

Obviamente que esto es difícil en un mundo en que dos tercios de la humanidad pasa necesidades y un 1% concentra una riqueza equivalente a lo que necesita la mitad más pobre de la población del planeta para sobrevivir o para ir muriendo con paciencia.

Además, en un tiempo, por cierto que brevísimo en comparación con el que el homo sapiens lleva andando sobre este planeta (y aún muy breve comparado con lo que llevamos desde que dejamos de ser puros cazadores), agotamos aceleradamente las condiciones de habitabilidad humana del planeta: ensuciamos y cerramos cuartos de nuestra única casa común.

La guerra fría terminó, el totalitarismo comunista se implosionó, y ahora avanza sin límites el totalitarismo corporativo de transnacionales. La tercera posición peronista nos muestra su profunda verdad: no había ninguna opción totalitarismo-democracia, sino una polarización entre dos totalitarismos.

Se nos escapa la realidad en medio de un mundo de ficción: el totalitarismo corporativo vive en la ficción. En efecto: hemos inventado personas, personas jurídicas, que no son humanas, sino acumulaciones de dinero en cantidades increíbles, que no sabemos a quién pertenece, sus dueños podemos ser nosotros mismos, pero que manejan tecnócratas entrenados para producir más dinero y encargados exclusivamente de hacerlo, so pena de ser reemplazados.

El dinero mismo se ha vuelto una ficción: recibimos y pagamos en dólares porque confiamos en que así seguirá siendo, pero nada más. El papel moneda mismo ni siquiera circula en grandes cantidades como tal, sino que se transfiere presionando una tecla. 

Esos conglomerados inmensos tienen sus sedes en los países del hemisferio norte. Los políticos de esos países se han convertido en lobbistas y agentes de las corporaciones, que los dominan porque pueden desplazarse horizontalmente cuando quieran, mientras que la política es por naturaleza local. Puede decirse que ya no gobiernan, sólo administran.

Esos administradores tienen únicamente el poder de presionar al resto del mundo para debilitarles sus Estados y en algunos casos destruirlos. América Latina es víctima de estas presiones, que debilitan nuestros Estados para modelarnos sociedades con pocos incluidos y muchos excluidos, lo que alguien ha denominado la sociedad 30 y 70.

"La tercera posición peronista nos muestra su profunda verdad: no había ninguna opción totalitarismo-democracia, sino una polarización entre dos totalitarismos... el totalitarismo corporativo vive en la ficción. En efecto: hemos inventado personas, personas jurídicas, que no son humanas, sino acumulaciones de dinero en cantidades increíbles, que no sabemos a quién pertenece, sus dueños podemos ser nosotros mismos, pero que manejan tecnócratas entrenados para producir más dinero y encargados exclusivamente de hacerlo, so pena de ser reemplazados."

Ese modelo de sociedad requiere la contención del 70% excluido, que en parte logra con una creación de realidad también de ficción, mediante monopolios de medios de comunicación audiovisuales.

Pero como la creación mediática de realidad tiene límites, el totalitarismo corporativo extrema su tecnología de control: nos filman, nos escuchan, los leen, se meten en nuestros hogares, suprimen toda privacidad, nos controlan con cámaras y con drones, generan pánico, miedo ante el terrorismo o ante la delincuencia común, nos fabrican estereotipos de adolescentes peligrosos, nos inventan adolescentes asesinos seriales que no existen, todo para que complacidos aceptemos los controles que cada día nos quitan un pedazo de libertad. 

Mas como aún así también este control tiene límites, montan con el mismo pretexto aparatos represivos, que muestran una pretendida eficacia preventiva que no tienen, pero que sirven para contener descontentos y disidentes que se atreven a proyectar una sociedad diferente a la del 30% de incluidos y el 70% de excluidos.

Como es dable deducir, este totalitarismo corporativo es por esencia enemigo de los Derechos Humanos. Pretende disfrazarse de liberal, aunque Locke y todos los que pensaron el liberalismo se conmuevan en sus tumbas, porque la única libertad que defienden es la de las corporaciones, es decir, de las personas jurídicas, de las personas de ficción, pero no de las personas de carne, hueso y sangre, cuyo destino –incluso como especie- no se toma en cuenta.

Lo que sufrimos hoy en América Latina se inserta en este marco de poder planetario. Estamos viviendo la etapa de colonialismo avanzado que corresponde al totalitarismo corporativo. Somos virreinatos del siglo XXI, sólo que despersonalizados, porque en este totalitarismo, así como nadie es dueño del dinero tampoco lo es del poder: no hay un Hitler ni un Mussolini ni un Stalin, ni siquiera un Franco o un Oliveira Salazar. Tampoco tenemos en la Argentina a un Vértiz y ni siquiera quizá a un Sobremonte. Sólo administradores del sur, chief executivers officersde menor jerarquía, que negocian con los administradores del norte acerca de los detalles de su subordinación. Personajes coyunturales que pasan y van a morar en el olvido, disfrutando de los beneficios obtenidos. 

El mundo cambió demasiado rápidamente y esto produce desconcierto, pero no podemos equivocarnos: el momento histórico es diferente a todos los anteriores, porque la historia no se repite, sino que se continúa.

No llama la atención en este contexto mundial y regional, en que los Derechos Humanos y su derecho internacional no es más que un obstáculo a eliminar por parte del avance totalitario corporativo, que en nuestro país, la Corte Suprema haya declarado prescriptibles las acciones civiles de reparación por crímenes de lesa humanidad, contrariando la posición de todo el sur del planeta, que conserva la esperanza de reparaciones por los genocidios colonialistas.

"Estamos viviendo la etapa de colonialismo avanzado que corresponde al totalitarismo corporativo... No llama la atención en este contexto mundial y regional, en que los Derechos Humanos y su derecho internacional no es más que un obstáculo a eliminar por parte del avance totalitario corporativo, que en nuestro país, la Corte Suprema haya declarado prescriptibles las acciones civiles de reparación por crímenes de lesa humanidad."


Tampoco llama la atención que la misma Corte Suprema, violando el derecho internacional y el propio constitucional, variando inconsultamente su jurisprudencia pacífica, en una causa en la que ni siquiera debía pronunciarse, se haya proclamado intérprete de la Convención Americana de Derechos Humanos, decidiendo cuándo y cómo habrá de cumplir con las decisiones de los órganos jurisdiccionales internacionales.

Compagina perfectamente con el avance del totalitarismo corporativo la idea de que los tratados internacionales incorporados a la Constitución Nacional en función del inc. 22º del art. 75º, son derecho prestado y de segunda categoría.

¿Qué otra cosa puede pensarse de las expresiones injuriosas y difamatorias del Presidente hacia la justicia laboral y los abogados laboralistas? ¿Se erige en el continuador de la Corte Suprema de la oligarquía, que se negó a tomar juramento a los primeros jueces laborales? Recordemos que fue una de las imputaciones por las que se removió a sus ministros en el juicio político de 1947 (la otra importante fue la acordada de setiembre de 1930). El Presidente no ha tenido ni siquiera la elemental hipocresía de disimular lo que piensa: reclama jueces propios. ¿Por qué no propone la disolución del fuero laboral y volver a la justicia civil, por ser más liberal e igualitaria?

No podemos dejar de mencionar el nuevo Plan Cóndor judicial. Ya no se mata, se secuestra ni se manda al exilio a los líderes o posibles líderes, ni se proscriben partidos, sino que en el Mercosur se trata de excluir a todo dirigente popular peligroso para los programas del totalitarismo corporativo por vía judicial, valiéndose de jueces adictos, estrellas o atemorizados. Tal es el procedimiento seguido o intentado con Cristina, con Lula y con Lugo y, ahora parece que hasta se lo intenta con Pepe Mujica.


"No podemos dejar de mencionar el nuevo Plan Cóndor judicial. Ya no se mata, se secuestra ni se manda al exilio a los líderes o posibles líderes, ni se proscriben partidos, sino que en el Mercosur se trata de excluir a todo dirigente popular peligroso para los programas del totalitarismo corporativo por vía judicial, valiéndose de jueces adictos, estrellas o atemorizados. Tal es el procedimiento seguido o intentado con Cristina, con Lula y con Lugo y, ahora parece que hasta se lo intenta con Pepe Mujica."


Cierta sorpresa causa la insólita sentencia del famoso dos por uno, porque en verdad, a juzgar por Chile y otros países, los genocidas de la etapa anterior del colonialismo fueron usados y luego, terminada su labor, el totalitarismo corporativo los consideró contaminantes y se desentendió de su destino. Sin duda que ese intento fue una muestra más de regresión en materia de Derechos Humanos, pero que debe mover a reflexión acerca de nuestros folklóricos personeros de ese totalitarismo. Tal vez algunos sean más agradecidos que otros respecto de sus predecesores en anteriores etapas de colonialismo. No obstante, la reacción inmediata del oficialismo de turno puso distancia de semejante agradecimiento y dejó a la intemperie a la mayoría de su propia Corte Suprema.

A todo esto debe agregarse el papelón internacional que sufrimos todos los argentinos con la detención puramente política de Milagro Sala. No se trata de un gobierno, sino de nuestra imagen como Nación en el concierto internacional. Un juego partidista mantiene esa detención en un feudo dominado por un gobernador del que no puede prescindir el oficialismo de turno sin una crisis interna, cuando constitucionalmente correspondería la intervención federal. El testigo de cargo más importante contra Milagro es uno de sus empleados, y la manipulación del Superior Tribunal de la Provincia no deja de ser un escándalo mayúsculo, sin contar con la complacencia de alguna cámara federal obediente.

Lamentablemente, la regresión en materia de Derechos Humanos no se detendrá. El oficialismo marcha hacia un nuevo e inevitable ajuste y tiene sólo dos fuentes: nuevo aumento de las tarifas y ANSES. Cualquiera de los dos temas lesionará más Derechos Humanos de los más humildes y, finalmente, alcanzará a la clase media aturdida por el bullanguero espectáculo televisivo.

Pero los pueblos no se quedan quietos. Latinoamérica toda se pondrá de pie nuevamente, no es la primera vez que sufrimos el colonialismo y esta etapa totalitaria también habrá de superarse. El camino de los Derechos Humanos se retomará, sólo que debemos cuidarnos de las provocaciones: los veteranos debemos cuidar y advertir a los más jóvenes, que por suerte no han conocido momentos de represión.



Buenos Aires, 4 de julio de 2017



*Profesor Emérito de la UBA